La identidad personal. Aprender a conocerse a uno mismo.

La identidad personal. Aprender a conocerse a uno mismo.

Cada persona debe de aprender a conocerse a sí mismo, con sus virtudes y sus defectos, siendo esta la clave para que alcanzar el éxito en la vida. Debes tener presente que, si no te aceptas a ti mismo tal y como eres, ¿cómo pretendemos que los otros nos acepten? Para ello, tenemos que saber exactamente cómo somos, qué nos gusta y qué no, qué se nos da bien, qué no tanto, a qué queremos dedicar nuestro tiempo libre y qué es lo que nos motiva para seguir levantándonos cada mañana.

Seguramente alguna vez te has hecho la pregunta existencial ‘¿Quién soy yo?una pregunta compleja que puede ser tratada desde muchos puntos de vista más o menos filosóficos pero que es de vital importancia para nosotros conocer firmemente la respuesta y ser plenamente consciente de que no somos perfectos, que nos equivocamos y que existen muchas cosas de nosotros que podríamos mejorar, si bien esto no sea sencillo.

¿Qué ocurre cuando no sabemos quiénes somos?

La crisis de identidad se produce cuando no sabemos responder a esta pregunta o incluso, cuando después de habernos formulado la misma nos damos cuenta de que aquello que hacemos a diario no nos gusta y que aspiramos a ser algo completamente opuesto. Tal vez pensamos en tener un trabajo completamente distinto que nos complete y nos apasione, tal vez la pareja con la que llevamos años ya no nos dice absolutamente nada y tenemos la imperiosa necesidad de un cambio o incluso vamos un paso más allá y queremos escapar de todo cuanto tenemos, irnos a otro país y empezar de cero.

Este brusco cambio de pensamiento, que se da con una frecuencia muy superior a lo que uno podría llegar a pensar, nos permitirán alcanzar la felicidad, y es que, cuanto antes comprendamos quienes somos, antes podremos tomar las acciones necesarias para que encontremos el bienestar personal.

Momentos cruciales en los que la identidad de uno mismo puede cambiar

Una persona va cambiando su punto de vista, su pensamiento y su identidad a lo largo de toda su vida. Sin embargo, existen momentos especialmente críticos en los que la identidad de una persona puede cambiar bruscamente.

Quizás el más importante de todos es la adolescencia, una etapa en la que los niños dejan de serlo, dejan de hacer caso a sus referentes maternos, paternos, escolásticos y cualesquiera otros que puedan influenciarles y empiezan a pensar con su propia cabeza planteándose lo que realmente piensan ellos como individuos y si todo aquello que les han ido inculcando hasta ese momento encaja con lo que ellos desean o si, por el contrario, prefieren ver el mundo desde otra perspectiva.

Crisis de identidad o crisis existencial, cómo superarla

En ocasiones, puede empezar a rondarnos una idea en la cabeza. ‘No me gusta quién soy, no me gusta mi vida’. Es en ese momento en el que rompemos con todos nuestros esquemas pues, hasta que no sepamos quienes somos realmente, no podremos alcanzar la felicidad.

Mientras estamos en ese estado en el que no sabemos exactamente lo que queremos para nosotros mismos, no podremos continuar con nuestra vida normal. Por ello la pregunta que hay que hacerse es… ¿cómo superar una crisis de identidad? Para ello existen numerosos talleres personales y de grupo que nos permitirán encontrarnos a nosotros mismos.

Talleres de identidad personal. Descubre quién eres

En los talleres de identidad personal se busca que la persona responda a las preguntas concretas que le ayudarán a conocerse a sí mismo. ¿Cómo me describiría a mi mismo? ¿Qué cosas valoro de mí? ¿Qué no me gusta de mí? ¿Qué desearía que fuera distinto en mi vida? Posteriormente se hacen estas mismas preguntas a otros compañeros grupales que te conozcan desde hace tiempo. A veces, podemos encontrar a personas que nos conozcan incluso mejor que a nosotros mismos.

Saber qué piensan los demás sobre nosotros nos podrá hacer reflexionar si lo que ellos han dicho realmente encaja con lo que somos o no. Finalmente, en estos talleres suele trabajarse la autoestima. Para ello se pide que cada persona describa aspectos de sí mismo que le gusten verdaderamente y explique los motivos de por qué se siente tan satisfecho. Este último apartado es fundamental para que las personas comprendan el camino a seguir, buscando hacer en su vida únicamente aquellas cosas que les den felicidad.